La globalización como lo podemos ver puede tener sus beneficios pero también puede traer malas consecuencias. En el caso de países en desarrollo, como lo es México, la globalización social trae consecuencias que afectarían nuestro modo de vivir. En primera, porque trae desempleo. Esto nos causa una desigualdad social impresionante, pues mientras las personas desempleadas no tienen ingresos, las personas que trabajan siguen teniendo ganancias. Por lo que los ricos siguen produciendo ganancias, mientras que los pobres pierden más. Esta pobreza y desigualdad causa violencia, la cual es el mayor problema en nuestro país actualmente.
En caso de que se nos imponga una sola cultura, perderiamos todas nuestras tradiciones y costumbres que nos hacen ser lo que somos, es decir, nuestra identidad nacional. Esto no pasaría sólo con México, sino también con todos los países, pues se improndrían nuevas costumbres. Y las tradiciones de que distinguen a cada país y lo diferencian de los demás se perderían.
Por otra parte para los países desarrollados, en este caso las potencias que impondrían su autoridad, la globalización les beneficiaría totalmente, ya que se haría lo que ellos mandaran. Les brindaría ganancias, territorios, y lo que más anhelan, es decir, el poder. Pero mientras ellos ganan, nosotros perdemos, porque sus ganancias son a costa de nuestra explotación.
Pero en verdad, si se unificara o más bien se globalizara el mundo en el ámbito social, ¿tendríamos todos las mismas oportunidades y la misma calidad de vida? Porque puede ser que se busque la igualdad de todos, pero de la manera en que un país quiere el control absoluto, ¿no muchos países lucharían por este control?
Analaura Tostado
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